¿Un episodio más?

Según informara el diario El País, el expresidente Luis Alberto Lacalle Herrera habría dicho el viernes, una vez confirmada la renuncia de Laura Raffo al herrerismo: «Ya está… es un episodio más».

La derrota electoral de su candidata – y del herrerismo todo – habrían sido determinantes para generar el desacuerdo y desconocer lo que al parecer era un compromiso de que Raffo ocupara el primer lugar en la lista al Senado.

Sin embargo, lo acontecido podría no tratarse de “un episodio más” sino de la confirmación de un deterioro cada vez más evidente de uno de los sectores con más preponderancia y tradición del Partido Nacional.

Si de verdad existió ese compromiso, el mismo debió respetarse. No parece para nada buen criterio culpar a la candidata de una derrota imprevista. Cargaba sobre sus hombros con el retiro de varios de los líderes históricos de la agrupación de la actividad política activa y el asunto Penadés que sacudió hasta los cimientos al sector.

Por otra parte, la insistencia de un político con una trayectoria de treinta y cinco años en el Parlamento en mantenerse activo encabezando la lista al senado, parece olvidar que las bancas se obtienen con votos y estos con renovación y trabajo en equipo.

No parece tratarse de un episodio más. En todo caso, se trata de una seria decisión que, adoptada por mayoría, resuelve respaldar la permanencia activa de Heber en detrimento de una renovación que lleva años gestar.

Si a esto agregamos las anunciadas negociaciones con Juan Sartori, que lo único que podrían aportar al sector serían fondos frescos, el herrerismo parece perder el norte y sus principios y valores parecerían diluirse lastimosamente.

Allí donde el peso y la experiencia de los mayores guiando y aconsejando se convertirían en un respaldo inigualable para los nuevos protagonistas, justo allí se bloquea el ascenso a la renovación en aras de la continuidad y se sustituye o se intenta sustituir por un inversor que mira a la política como un juego entretenido.

No vemos que lo ocurrido y lo que le sigue en este proceso se trate de “un episodio más”.

Parece ser el triste final de una era exitosa, que sus lideres no tuvieron la visión de renovar, asegurando así su propia vigencia y continuidad.

Respuestas a esta publicación

Compartir Este Artículo
Reciba Notificaciones
Más Noticias

Artículos relacionados