En el Uruguay de fines de los sesenta o inicios de los setenta, todo lo que oliera a derecha – y sin la más mínima justificación – era tildado de “facho” por una extrema izquierda que pretendía acceder al poder, pero había equivocado el medio para lograrlo.
Obviamente sin buscarlo, la guerrilla tupamara nos terminó trayendo de regalo una dictadura con distintos matices de la que ellos buscaban, pero en el fondo, la misma.
Una ausencia total de libertad y un desprecio por las ideas o derechos individuales, todo en nombre del bienestar general y del bien común, pero, en definitiva, para beneficio exclusivo de los dueños del poder.
Como si nada de esto hubiera existido, hoy, en mayo de 2024, seis décadas después y ya bien entrado el siglo XXI, un grupete de estudiantes de la Universidad de la República sostenida y financiada por todos los uruguayos ha resuelto redoblar la apuesta.
Como si la palabra laicidad no existiera o si una revolución reivindicadora hubiera decidido apropiársela, ha sido censurado un profesor de reconocida trayectoria y promovida su exclusión, por el hecho de ser judío.
Desde Libertad Responsable, respaldamos plenamente al profesor Alberto Spektorowski, al tiempo que rechazamos y advertimos del riesgo entrañado en el surgimiento de actitudes claramente inaceptables y de apariencia neonazi en nuestro país.
Con la más sorprendente impunidad que una muy malinterpretada laicidad podría otorgar, se viene pretendiendo validar una inaceptable acción discriminatoria, solo comparable a la que diera origen al nazismo y a sus vergonzantes consecuencias.
El Uruguay entero espera una respuesta clara y contundente de la totalidad del sistema político, ante un hecho de tan extrema gravedad.