Productores de cacao favorecidos con los Sistemas Agroforestales Dinámicos

Tegucigalpa, 7 abr (EFE).- Productores hondureños de cacao están satisfechos por las mejores oportunidades que están teniendo en su actividad con los Sistemas Agroforestales Dinámicos (DAF).

 Los sistemas DAF cacao integran diversidad de especies de plantas, en asocio con un cultivo principal (cacao), de tal manera que se promueve la simbiosis suelo-planta-ambiente para optimizar los rendimientos y mejorar las condiciones en la producción de cultivos orgánicos.

«La meta de uno es superarse y siento que con los Sistemas Agroforestales Dinámicos (DAF) de cacao voy por el camino correcto,» dijo el productor Fernando García, en la comunidad Barbas Cheles, departamento de Cortés, en el Caribe de Honduras.

EL CAMBIO NO ES CASUALIDAD

García pasó de producir monocultivo a tener ahora una finca de 4,5 manzanas (tres hectáreas) diversificada con cacao, granos básicos, frutales, maderables, y de quemar después de cada siembra a tener un buen manejo del suelo y de su parcela.

No es casualidad que García cambió su forma de producción y hablar con propiedad de los sistemas DAF cacao y sus beneficios.

El productor, de 67 años y socio de la cooperativa San Fernando, empezó a trabajar cacao desde cero en el 2020, ya que no había en Honduras este tipo de sistemas.

Él tiene una de las seis parcelas pilotos de sistemas DAF de cacao que impulsa, en alianza entre la empresa y Fundación Chocolats Halba, el Proyecto Gestión de Conocimiento de la cadena de valor del cacao en Centroamérica (GESCON) que implementa Rikolto y el Proyecto PROCACAHO, con la financiación de la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (COSUDE), para validar e introducir la tecnología con los pequeños productores de Honduras.

El director de la Fundación Chocolats Halba Honduras, Luis Regalado, dijo que «se empezó con seis parcelas pilotos DAF de cacao para dar a conocer el sistema a los productores e ir introduciéndolo en Honduras, que conocieran sus beneficios y que es una alternativa para la producción de cacao orgánico, que es el enfoque de CHocolats Halba.

Añadió que los DAF «son un sistema de producción sostenible que ayuda a fortalecer el sistema de producción de cacao orgánico, porque facilita el cumplimiento de requisitos exigidos por las normas de certificación orgánica, por la diversidad de especies que se incluyen en el sistema y por las prácticas de manejo que se implementan en la finca».

Los beneficios se reflejan en la conservación del suelo, cultivos de cobertura, prácticas enfocadas en reducir la erosión y con alta acumulación de biomasa que se convierte en materia orgánica, ayudando de esa forma a mejorar las condiciones de producción los suelos cacaoteros de Honduras, señaló Regalado.

Además, los sistemas DAF cacao están ayudando a la seguridad alimentaria de las familias.

«El tener diversidad de cultivo me ha ayudado mucho porque tengo otros ingresos a corto plazo y alimentos que comer», señaló Fernando García, quien comenzó en Sistemas DAF cacao con fríjoles, maíz, plátano, canavalia (planta que se utiliza como abono verde y cultivo de cobertura), y ahora tiene piña, yuca, caña, guanábana, naranja, mandarina, guayaba, nancite y maderables, entre otros cultivos.

EL BENEFICIO DE NO QUEMAR EL SUELO

Benancio Bonilla, técnico de Chocolats Halba, señaló que en las parcelas DAF cacao se empieza sembrando semillas pioneras como fríjol, maíz, gandul, canavalia, jamaica y ayote, para tener una producción de granos básicos para la familia productora, además, incorporando biomasa al suelo.

Fernando García cambió totalmente sus prácticas, ahora no quema la tierra y está elaborando y aplicando abonos orgánicos que aprendió a fabricar con recursos de la finca en las Escuelas de Campo que le brindó Chocolats Halba. Pero lo más importante es que en el futuro el abono orgánico será producido por el mismo sistema DAF, sin necesidad de realizar el esfuerzo de traerlo de afuera.

«En la Escuela de Campo todos los productores hicimos en conjunto un abono, lo apliqué en arboles desnutridos y les he visto el cambio», agregó García mostrando complacido el abono orgánico que está procesando con plátano picado, caña picada, serrín, hojas de madreado y ceniza.

Los sistemas DAF cacao además son una medida frente al cambio climático. De acuerdo a Luis Regalado, ayudan a reducir el impacto negativo de la sequía, ya que al tener mayor cantidad de materia orgánica en el suelo es menor la perdida de humedad y el impacto de estrés en la planta se reduce.

SE ESCALA SISTEMA

Fernando García ya está obteniendo ingresos de la parcela a pesar que el cacao aún está en desarrollo, de dos años, mientras que el plátano que sembró para generar sombra al cacao ya lo comercializó.

El productor destacó que se motivó a ampliar el sistema DAF cacao de su parcela, de una a cuatro hectáreas, por los beneficios que representa y tener un mercado garantizado de su cacao orgánico con Chocolats Halba.

La coordinadora del proyecto GESCON, Ninoska Hurtado, subrayó que la vitrina de parcelas pilotos de los sistemas DAF cacao, logró su objetivo y sirvió para generar capacidades con la introducción de DAF a Honduras, darlos a conocer a los productores y escalarlo.

Desde el 2021 el proyecto PROCACAHO, la empresa y Fundación CHocolats Halba, con el apoyo de una agencia internacional están implementando un proyecto DAF cacao en 80 hectáreas con 80 productores de las cooperativas.

Al respecto, Luis Regalado comentó que el apoyo de CHocolats Halba en el proyecto es el compromiso de seguir comprando cacao, brindar la asistencia técnica en campo, y las plantas y semillas de frutales y maderables.

Comentarios sobre esta noticia: Rediseño Funcional de la Producción

Por: Marianela Martínez

Lo que más despertó mi interés de esta noticia, son las consecuencias positivas de los Sistemas Agroforestales Dinámicos en la conservación de los suelos, la reducción de los impactos de la sequía y la seguridad alimentaria. Se los considera una estrategia efectiva frente al cambio climático. Y me pregunté si en Uruguay se utilizan y de qué manera.

En el Centro Uruguayo de Tecnologías Apropiadas (CEUTA) -Fundación Independiente y sin fines de lucro- se realizó un estudio sobre los “Diseños agroecológicos para el cuidado del agua”, específicamente sobre “Zonas de Amortiguación Agroforestales”, donde se afirma que la intensificación agropecuaria es la principal responsable de la degradación de la calidad de las aguas. Además, para el Ing. Agroforestal Gastón Carro (Técnico del Programa de Agroecología de CEUTA), “la agricultura actual se parece más a “una minería a cielo abierto de nutrientes”, es decir, se extraen los nutrientes del suelo degradando su estructura que luego termina aguas abajo, contaminando los cursos de agua.”

Con el rediseño funcional de los sistemas productivos como los Sistemas Agroforestales (SAFS) donde se incluyen árboles, se logra que mejoren los servicios ecosistémicos, la diversidad aumente y la captura del carbono sea mayor.

Los SAFS se pueden aplicar en diversos procesos: en la implementación de Zonas de Amortiguación Agroforestales (ZAAs) en zonas linderas a los cuerpos de agua para la mejora en su calidad; en los sistemas de Silvopastoreo con el beneficio de bienestar animal asociado y; con el objetivo de producir alimentos (bosques comestibles), entre otros. Si nos detenemos en esta última aplicación, las especies nativas arbóreas de Uruguay (313 especies) tienen un rol fundamental, especialmente las frutales nativas como la Pitanga, el Guayabo del País, Butía, etc. Según el Ing. Agroforestal mencionado, “Éstas han demostrado superioridad absoluta en cuanto a concentración de nutrientes y efectos positivos en la salud, respecto a las frutas tradicionales, con la ventaja que están mejor adaptadas y tienen la capacidad de otorgarle personalidad a la gastronomía Uruguaya.” Ver fuente aquí.

Entonces, con los beneficios comprobados del rediseño funcional de la producción en distintos aspectos de la Vida, que rompen con el mito de que no es posible producir alimentos al mismo tiempo que se cuida y mejora el ambiente, ¿Existen políticas que promocionen modelos de producción agroecológicos?  ¿Estarán trabajando en conjunto los distintos actores involucrados?

Algunos indicios sobre las respuestas a estas preguntas las mencionaré en un próximo artículo.

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