Friedrich A, Hayek, realizó varias conferencias en España en la primavera de 1976, las cuales fueron publicadas por Unión Editorial.
De la primera de las tres conferencias denominada Los límites de la democracia, extraemos solamente su introducción:
“Hay una concepción de la democracia – para mí la auténtica y original – que tengo en la más alta estima y por la cual creo vale la pena luchar. Aunque no haya llegado a ser la segura protección contra la tiranía y la opresión que antaño de ella se esperara, como convención que permite a la mayoría librarse de los gobiernos indeseados, tiene un valor inestimable.”
“Por eso resulta cada vez más alarmante advertir la creciente desilusión que tal forma de gobierno está produciendo entre las gentes, desencanto que no cabe ya minimizar y que parece agudizarse en la medida en que – y quizá a causa de que – el mágico término democracia alcanza hoy preponderancia tal que todas las tradicionales limitaciones al poder del Estado parecen derrumbarse ante ella.”
Desde Libertad Responsable consideramos de enorme actualidad las palabras del Premio Nobel de Economía 1974, pronunciadas hace casi 50 años.
La “fiesta democrática” a la que nos convoca a los uruguayos cada cinco años el sistema político de forma obligatoria, garantiza concurrencia y financiación. Pero al parecer, solo está logrando entusiasmar a los grupos militantes, que por lo general persiguen intereses relacionados con los resultados.
La limitación paulatina al tamaño cada vez más desmedido del Estado y una participación ciudadana más activa y personalizada a la hora de elegir a sus representantes, podrían ser una buena forma de revertir esa tendencia al desencanto.